El expresidente boliviano Evo Morales llegó este martes a México como asilado en un avión de la Fuerza Aérea Mexicana que partió anoche de Bolivia e hizo una escala en Paraguay antes de emprender una complicada ruta por la región.
El exmandatario boliviano y el exvicepresidente Álvaro Garcia Linera fueron recibidos por el Ministro de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, y otras autoridades del Ejecutivo, tras de recibir asilo político por parte del gobierno mexicano, luego que se ejecutó un golpe de Estado en contra de su Gobierno por sectores opositores, Fuerzas Armadas y cuerpos policiales de Bolivia.
Evo Morales en breves declaraciones a la prensa agradeció al presidente Andrés Manuel López Obrador por otorgarle el asilo político en el país, ya que había sido notificado que su vida corría peligro después de consumarse el golpe de Estado en la nación andina.
El avión Gulfstream modelo G550 que México envió para trasladar a Morales, tuvo que dirigirse en primera instancia a Paraguay luego de su salida de Bolivia.

La escala de varias horas en Paraguay le permitió al Gobierno de México el tiempo para conseguir los permisos para sobrevolar Brasil y Perú, además de cargar de combustible la aeronave antes de reiniciar su vuelo.

El Gobierno de México le concedió el asilo a Morales por razones humanitarias "en virtud de la urgencia que afronta en Bolivia, donde su vida e integridad corren peligro", explicó el canciller Ebrard en un mensaje a medios este lunes.