El primer satélite geoestacionario diseñado, construido y testeado en Argentina, el ARSAT-1, será enviado desde Bariloche hacia la Guayana Francesa, donde será lanzado al espacio exterior el 16 de octubre próximo. El trabajo de planificación, investigación y desarrollo llevó ocho años.
El satélite, que demandó más de 1.300.000 horas/hombre de trabajo, cumplirá con el objetivo de incrementar las capacidades del vecino país en materia de telecomunicaciones e impulsar el desarrollo de la industria espacial. A través de él se brindarán servicios de TV, telefonía, Internet y datos a todo el territorio argentino y países limítrofes.
"Este es un hecho muy trascendente para Argentina porque es tecnología nacional y obviamente tiene un impacto y una repercusión desde el punto de vista del desarrollo tecnológico de Argentina", dijo en rueda de prensa el jefe de Gabinete de Argentina, Jorge Capitanich.