fbpx

El comienzo de la década de los 70 fue monopolizado por un equipo y un futbolista: el Ajax de Johan Cruyff. El talentoso extremo zurdo holandés consiguió liderar un equipo temible que no se cansó de ganar títulos. Así, en tres temporadas, las que van de 1971 a 1973, Cruyff conquistó tres Copas de Europa, una Supercopa y una Intercontinental.

Por eso, 1974 se presentaba como el momento perfecto para convertirse en leyenda gracias a un triunfo de la selección. Holanda llegaba al Mundial de Alemania como gran favorita. Era un equipo formado a partir de aquél invencible Ajax. Aunque la mayoría de sus figuras –como el propio Cruyff, ya en el Barcelona- se encontraban en otros equipos, la selección oranje era una máquina perfecta de ganar. Y lo constató desde el inicio del campeonato.

Se produjo un gran cambio en el sistema de competición. Después de la primera fase de grupos, se iba a producir una segunda, dividida en dos grupos, de tal manera que los campeones de cada uno de ellos se enfrentarían en la final. Dicho de otro modo, no habría eliminatorias directas hasta el último partido.

Uno de los partidos más espectaculares que se vivió en la primera fase fue el que enfrentó a Uruguay y Holanda. Los uruguayos llegaban como máximos exponentes del estilo de fútbol sudamericano -Brasil al margen- mientras que Holanda era todo lo contrario: pases cortos, velocidad en el juego, ataque por encima de la defensa… probablemente el equipo más revolucionario de las últimas décadas. El que dio lugar al denominado fútbol total.

Por eso, se le otorga tanta importancia a la victoria de los holandeses por 2-0 en dicho partido. Era la demostración de que ese estilo también podía triunfar en una época en la que el fútbol era, sobre todo, defensa. El 2 a 0 con el que Holanda se impuso, con un doblete de Rep, fue muy significativo. Además, en el grupo, el segundo clasificado y que, por tanto, lograba su pase a la siguiente fase, era Suecia.

Aunque sin duda el partido más destacado de la primera fase fue el duelo entre la Alemania Federal y la Alemania Democrática, que disputaba por primera vez un campeonato del mundo. El sorteo quiso que ambas selecciones se enfrentaran, en un partido marcado por las durísimas medidas de seguridad que lo rodearon. Entre otras, un helicóptero sobrevolando el estadio durante los 90 minutos.

La victoria, además, fue para la débil, para la Alemania Democrática, gracias a un gol de Sparwasser. Ambas selecciones lograrían el pase a la fase siguiente. Nunca más volverían a enfrentarse.

Si la primera fase no había sido precisamente espectacular, menos lo fue la segunda. El hecho de que se tratara de una liguilla restó emoción a los enfrentamientos. Holanda, en el Grupo 1, ganó con comodidad sus encuentros, ante Argentina, Alemania Democrática y Brasil. Una Brasil que, pese a que llegaba como vigente campeona del mundo, lo hacía sin Pelé, Gerson o Tostao. Ya no eran lo mismo.

Alemania hizo lo propio en el Grupo 2. Se impuso a Yugoslavia y Suecia con relativa comodidad, y sufrió de lo lindo para superar a Polonia y asegurarse así un puesto en la final. Lo hizo gracias a un solitario tanto de, quién si no, Gerd Muller.

Así, después de un campeonato no demasiado brillante, la final se presumía como un gran partido. Y no decepcionó. Se citaban el gran favorito desde antes de comenzar, Holanda, y el anfitrión y siempre fiable combinado alemán. Aún así, la empresa para los germanos era complicada. Holanda era superior. Y lo había demostrado durante todo el campeonato. Su fútbol total no dejaba de crecer. Había llegado a la final tras ceder tan solo un punto, y encajar un único gol en los seis partidos que había disputado. Era la gran favorita.
Condición que se acrecentó en la primera jugada del partido. Tras sacar los holandeses de centro, dieciocho pases consecutivos terminaron con un penalti de Hoeness sobre Cruyff que transformaría Neeskens. El resultado ya era de 1-0, y Alemania aún ni había tocado el balón.

Y comienza el asedio alemán. En media hora, siete saques de esquina. Y en el minuto 27, Holzenbein es zancadilleado dentro del área por Jansen, y el árbitro decreta pena máxima. Breitner no la desaprovecha. Empate a uno. El choque ya está empatado. De hecho, se abre más que nunca. Y cuando parecía que era Holanda quien más cerca se encontraba del gol, el cañonero Muller, aún antes del descanso, ponía a los alemanes por delante. Ver para creer.

En la segunda mitad Holanda sacó a relucir su mayor calidad -indudable-, y encerró a Alemania durante 45 minutos. Pero los germanos se valieron de su fortaleza física -también indudable- para resistir el marcador, con un héroe por encima de todos: el portero Seep Mayer. Para siempre quedará su parada a bocajarro tras disparo de Johan Cruyff. Era la imagen de lo que estaba siendo el partido: la magia no puede con la fuerza.

Y así, se terminó el partido, con los alemanes vencedores en casa contra todo pronóstico dando la vuelta de honor delante de su afición, enloquecida. Mientras, en un fondo del estadio, los holandeses desconsolados, por una final que nunca creyeron capaces de perder. Quizá, una final que nunca merecieron perder. Pero una final que perdieron, y que les dejó sin el título mundial que tanto anhelaban.

A pesar de eso, la Naranja Mecánica será considerada una de las mejores selecciones de la historia y llamada por muchos como : "La selección sin corona".

El campeonato mundial de México 1970 estuvo lleno de novedades. Para empezar, por primera vez se jugó un Mundial fuera de Europa o Sudamérica.

Por otro lado, puede considerarse a México 70 como el primer Mundial moderno. Fue ahí cuando se introdujo por primera vez la posibilidad de realizar cambios, lo que sin duda favoreció la diversión.

Además, aparecieron las tarjetas, tanto amarillas como rojas, como una manera de dejar más claro a todos lo que sucedía entre el árbitro y los futbolistas –las expulsiones ya existían, aunque de manera verbal–.

Curiosamente, no hubo expulsiones en este certamen. Y fue este el primer Mundial que pudo ser visto de manera íntegra por televisión, y por primera vez en color. No pudo haber mejor ocasión para estrenarse.

Adidas debutó como fabricante del balón mundialista en el mejor momento posible. Nombrado en honor de un satélite de comunicaciones lanzado desde la Florida y una exitosa canción instrumental de The Tornados, el Telstar —con sus 32 paneles hexagonales en blanco y negro— es el balón más icónico jamás creado.

En México, este balón estuvo al centro de partidos mágicos, los cuales siguen siendo considerados como los mejores en la historia de la Copa Mundial, gracias a un fútbol vertical que resultó en el mayor promedio de goles anotados en un solo torneo, con 2.97 por partido.

Los precios al consumo volvieron a acelerar su ritmo de aumento en el inicio del año, aunque se mantuvieron dentro del rango objetivo trazado por las autoridades. La inflación anual alcanzó a 6,67%

El Consejo de Ministros realizado en Anchorena reafirmó las prioridades del Gobierno, que son: educación, salud, seguridad, vivienda y empleo, informó el director de OPP, Álvaro García.

Con goles del ecuatoriano Fidel Martínez a los 30’ y Lucas Hernández a los 50’, Peñarol venció a Racing por 2 a 0. En los albiverdes Ignacio Nicolini se fue expulsado a los 31’.

Matías Cabrera de penal abrió el tanteador a los 23 minutos, y dos más tarde Jonathan Ruíz Díaz venció su propia valla, decretando el segundo gol violeta.
Apenas iniciado el complemento, Ayrton Cougo aumentó las cifras para el equipo de Parque Rodó.

Defensor Sporting 3 - Atenas 0
Cancha: Estadio Franzini. Hora: 19:30. Jueces: Héctor Martínez, Sebastián Silvera y Andrés Nievas.
Goles: 23’ Matías Cabrera (DS) de penal, 25’ Jonathan Ruíz Díaz (A) en contra, 48’ Ayrton Cougo (DS).

En su visita al Parque Paladino, Danubio se puso en ventaja por intermedio de David Terans a los 24’. A los 35’ Leandro Onetto igualó el score para el equipo del Pantanoso.
Progreso 1- Danubio 1
Cancha: Parque Paladino. Hora: 17:00. Jueces: Oscar Rojas, Robert Muniz y Gustavo Márquez Lisboa.
Goles: 24' David Terans (D), 35’ Leandro Onetto (P).

El equipo negriazul arrancó ganando a los 38’ con gol de Diego Guastavino y parecía llevarse la victoria en su visita al Tróccoli.
Pero Leandro Zazpe logró el tanto del empate para los albicelestes a los 49 minutos del complemento.
CERRO 1 - LIVERPOOL 1
Cancha: Estadio Tróccoli. Jueces: Diego Riveiro, Horacio Ferreiro y Eduardo Aguirre.
CERRO: Yonatan Irrazábal; Christian Núñez, Emiliano Díaz, Darwin Torres, Leandro Zazpe; Lucas Tamareo, Richard Pellejero (60′ Maureen Franco), Leandro Paiva (55′ Aníbal Hernández), Felipe Klein, Franco López y Héctor Acuña (77′ Nicolás González). Director Técnico: Fernando Correa.
LIVERPOOL: Jorge Bava, Jean Pierre Rosso, Juan Alsina, Federico Platero, Mathías Pintos, Sebastián Píriz (82′ Matheus Cuello), Santiago Viera (58′ Christian Souza), Hernán Figueredo (65′ Angelo Gabrielli), Diego Guastavino, Federico Martínez y Juan Ignacio Ramírez. Director Técnico: Paulo Pezzolano.
Goles: 38′ Diego Guastavino (L), 94′ Leandro Zazpe (C).

Con cuatro partidos se completa la primera fecha del Torneo Apertura. Racing-Peñarol juegan en el Centenario a las 19:30 horas.

Nacional le ganó por 4 a 2 a Torque, en el Estadio Centenario, por la primera fecha del Torneo Apertura con dos goles de Gonzalo Bergessio, uno de Leonardo Barcia y otro de Santiago Romero.

 

UD Portal I En Red Estamos - Todos los derechos reservados

¿Te gusta Ud?

Close

Seguínos en nuestras redes y compartí!