La curtiembre suspendió los despidos que había anunciado días atrás y en su lugar enviará a este personal al seguro de paro durante cuatro meses.
El jueves de la semana pasada se conoció que la curtiembre Zenda –propiedad de la multinacional brasileña JBS– había anunciado que dejaría dos de sus tres plantas en el país y despediría a 370 trabajadores.
Este lunes, sin embargo, la empresa puso un freno a esta decisión. La curtiembre suspendió los despidos que había anunciado días atrás. En su lugar, enviará a este personal al seguro de paro durante cuatro meses.
En tal sentido, la Unión de Obreros Curtidores (UOC) tendría una reunión en el Ministerio de Trabajo (MTSS), donde propondrá el envío al seguro de paro de esos 370 trabajadores.
A última hora del jueves, Zenda había enviado un escueto comunicado donde señaló que “está reestructurando su operación en Uruguay”.
Explicó que “mantendrá sus operaciones de terminación y corte y discontinuará la producción de cuero wet blue y semiterminado”, una decisión “basada en el análisis de mercado y viabilidad económica teniendo como factor central la situación adversa del mercado local e internacional del cuero”.
Añadió que está realizando “todos los esfuerzos para minimizar los impactos de esta decisión en los colaboradores de sus operaciones que serán discontinuadas”.